Señor Presidente:
Nos alegra y agradecemos haber recibido la visita del Relator Forst, la primera de un procedimiento especial que Colombia acepta en ocho años.
Durante el año 2018 al menos 154 defensores de derechos humanos fueron asesinados en Colombia[1]. De estos, al menos 16 eran mujeres[2]. Todas las cifras muestran que, después de la firma del Acuerdo de Paz, los asesinatos aumentan de manera constante. Se evidencian patrones relacionados con la condición de las víctimas, la ubicación geográfica de estas, la frecuencia y los presuntos autores[3]. Esto indica que se trata de violencia perpetrada de manera reiterada, metódica y no aleatoria, a la que incluso la Fiscalía ha reconocido como sistemática[4].
Las medidas contempladas en el Acuerdo de Paz para enfrentar estas agresiones no están siendo implementadas y el Plan de Acción Oportuna de Prevención y Protección para los defensores de derechos humanos, líderes sociales, comunales y periodistas (PAO), publicado en noviembre pasado, equivocadamente plantea una respuesta estatal basada en la militarización[5]. Este Plan limita el riesgo a la presencia de economías ilegales en los territorios, y excluye como causas la acción de las empresas o de las Fuerzas militares y de Policía, la persistencia de grupos paramilitares y sus nexos con agentes del Estado, la discriminación contra mujeres y personas LGBT, o la ausencia del Estado de los territorios. No contiene ninguna propuesta innovadora y repite lo que ya existe; no contempla la participación de la sociedad civil, ni de la comunidad internacional y busca sustituir los escenarios de interlocución existentes.
Con al menos tres víctimas en enero de 2019[6], el número de asesinatos de mujeres defensoras también aumenta. A pesar de la adopción de medidas especializadas, urgen su implementación y la adecuada incorporación del enfoque de género para que puedan dar resultados. Frente a ello resulta particularmente preocupante la designación de militares con cuestionable trayectoria en derechos humanos y de integrantes de los sectores religiosos y políticos que promueven el concepto de “ideología de género”[7] como encargados de las garantías para las personas defensoras.
Le pedimos al Consejo de Derechos Humanos que acompañe al Relator Especial en el seguimiento que hará a la situación colombiana previo a la publicación de su informe final.
Gracias, señor Presidente.
[1] Programa No Gubernamental de Protección a Defensores de derechos humanos Somos Defensores. Sistema de Información Sobre Agresiones Contra Defensores de DDHH en Colombia (SIADDHH), febrero de 2019.
[2] Corporación Sisma Mujer. Cifras comparativas de los asesinatos de defensoras y defensores de derechos humanos en Colombia 2016 – 2018 y enero de 2017 a enero de 2019. Última actualización: 7 de febrero de 2019.
[3] Comisión Colombiana de Juristas, Confederación Nacional de Acción Comunal, Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional (IEPRI), Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP), Programa Somos Defensores, 6. Asociación Campesina del Catatumbo (ASCAMCAT), Verdad Abierta, Coordinación Colombia - Europa - Estados Unidos (CCEEU) y Movimiento Ríos Vivos Antioquia, ¿Cuáles son los patrones? Asesinatos de Líderes Sociales en el Post Acuerdo, disponible en: http://www.coljuristas.org/nuestro_quehacer/item.php?id=173.
[4] https://www.elespectador.com/noticias/politica/fiscalia-reconoce-sistematicidad-en-crimenes-contra-lideres-sociales-articulo-833539.
[5] BASES DEL PLAN NACIONAL DE DESARROLLO 2018 – 2022, PACTO POR COLOMBIA / PACTO POR LA EQUIDAD, Capítulo III. Pacto por la legalidad: justicia transparente y seguridad efectiva para que todos vivamos con libertad y en democracia, A. Seguridad y orden para la libertad: fuerza pública, compromiso ciudadano y tecnología para proteger la vida, honra y bienes de todos los colombianos, 2. Líneas estratégicas, a. Objetivo 1 y e. Objetivo 5.
[6] Matriz periódica de la Defensoría del Pueblo.
[7] Consejo de Derechos Humanos, 40° período de sesiones, Informe del Relator Especial sobre la situación de los defensores de los derechos humanos, 16 de enero de 2018. Documento. A/HRC/40/60. Párrafos 31 y 32.